sábado, 17 de diciembre de 2016

LO QUE HAGAMOS A LOS MÁS DÉBILES SE LO HACEMOS AL MISMO CRISTO


Lo que hagamos a los más débiles se lo hacemos al mismo Cristo, dice el Papa
Por Miguel Pérez Pichel
Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa.




VATICANO, 17 Dic. 16 / 09:45 am (ACI).- Ante miembros de la Comunidad de Nomadelfia, a los que recibió en audiencia en la Sala Clementina del Palacio Apostólico, el Papa Francisco recordó la obligación de todo cristiano de acoger a los débiles. Lo que hagamos a nuestros hermanos más débiles, se lo hacemos a Cristo mismo, advirtió el Santo Padre

“Quien haya alimentado, vestido y acogido a uno de los más pobres de entre los hombres, habrá alimentado, acogido y amado al mismo Hijo de Dios. Quien, al contrario, haya rechazado, despreciado y olvidado a alguno de los más débiles y pequeños, habrá rechazado a Dios mismo”, recordó.

El Pontífice reflexionó sobre lo que significa el Adviento para un cristiano. “El tiempo de Adviento nos ayuda a meditar sobre el misterio del Hijo de Dios llegado en carne, que con su nacimiento ha traído al mundo la luz y la paz”.

El Obispo de Roma señaló que “en Navidad, Dios no se revela como aquel que está en lo alto y que domina el universo, más bien se revela como aquel que se abaja y desciende, asumiendo el aspecto frágil de un niño. De este modo, Dios nos enseña que no debemos ponernos nosotros mismos por encima de los otros, sino que estamos llamados a abajarnos, a servir por amor a los más débiles, a hacernos pequeños con los pequeños”.


“Si Dios, mediante la venida de su Hijo a la tierra se involucró con el hombre hasta el punto de hacerse como uno de nosotros, excepto en el pecado, ello significa que, según la misma palabra de Jesús, cualquier cosa que hagamos a uno de los más pequeños, se lo haremos a Él”.

El Papa Francisco tuvo unas palabras de recuerdo de don Zeno Saltini, que fundó la Comunidad de Nomadelfia en el año 1948 con la finalidad de que niños abandonados pudieran tener una familia. “Don Zeno Saltini, su fundador, había entendido bien estas cosas e, incluso en medio de las dificultades y de los malentendidos, siguió hacia adelante con confianza, con el objetivo de llevar la buena semilla del Evangelio también a los terrenos más áridos. ¡Y ha tenido éxito! Su Comunidad de Nomadelfia es la prueba”, destacó.

“Don Zeno se presenta a nosotros hoy con ese ejemplo de fiel discípulo de Cristo que, a imitación del divino Maestro, se apoya en el sufrimiento de los más débiles y de los más pobres convirtiéndose en testigo de una caridad inagotable”.

El Santo Padre exhortó a los presentes a que la valentía y la perseverancia de Don Zeno “les sirvan de guía en su empeño cotidiano de hacer fructificar las semillas del bien que sembró de forma abundante, motivado por la pasión evangélica y por un sincero amor a la Iglesia”.

La Comunidad de Nomadelfia es una obra fundada en Italia en el año 1948 por el sacerdote Zeno Saltini. Su labor tiene por objetivo crear una red de familias que acojan a niños abandonados como si fueran sus propios hijos.

Estas familias viven juntas en poblados, o “ciudades”, siguiendo el ejemplo de las primeras comunidades cristianas. En la comunidad se comparten todos los bienes.

En Roma existe una pequeña comunidad, cuya principal función es acoger a peregrinos, en la que 50 familias acogen a unas 300 personas. Su comunidad más importante se encuentra cerca de la localidad italiana de Grosseto.

Según indican fuentes de la Comunidad de Nomadelfia, la Iglesia les reconoció y les erigió como parroquia en el año 1962. En 1994 se aprobó su nueva Constitución como “Asociación privada entre fieles”.

La Comunidad de Nomadelfia se adhiere a la doctrina, al culto y a las costumbres de la Iglesia. Para el Estado Italiano, Nomadelfia es una asociación civil organizada como una cooperativa de trabajo.

PAPA FRANCISCO CELEBRÓ SU 80 CUMPLEAÑOS DESAYUNANDO CON PERSONAS SIN HOGAR


El Papa Francisco celebró su 80 cumpleaños desayunando con personas sin hogar
Por Miguel Pérez Pichel
Foto: L'Osservatore Romano.



VATICANO, 17 Dic. 16 / 07:35 am (ACI).- Este sábado 17 de diciembre, día de su 80 cumpleaños, el Papa Francisco desayunó en la Casa Santa Marta con ocho personas sin hogar –dos mujeres y seis hombres– que suelen dormir bajo la columnata de la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.

En el desayuno también participó Mons. Konrad Krajewski, Limosnero de Su Santidad.

Entre las ocho personas sin hogar que desayunaron hoy con el Papa se encuentran cuatro italianos, un moldavo, dos rumanos y un peruano.


El Santo Padre saludó afectuosamente a cada uno, y ellos le regalaron tres ramos de girasoles que el Papa colocó inmediatamente en la capilla de la Casa Santa Marta.

Antes de concluir el desayuno, alrededor de las 7:45 a.m. (hora de Roma), el Santo Padre les regaló dulces argentinos.

En el transcurso del día, en muchos comedores de Roma, se servirá al finalizar el almuerzo o la cena una tarta de cumpleaños proporcionada por el Papa. Quienes se alojan en albergues recibirán una bolsa con una pequeña imagen en recuerdo de la Navidad y un pequeño regalo.

Durante los últimos días, el Papa Francisco recibió cerca de 50 mil felicitaciones y saludos por correo electrónico provenientes de todo el mundo. Los más numerosos son en inglés, español e italiano, pero también le escribieron más de mil felicitaciones en latín.

PAPA FRANCISCO EN SU 80 CUMPLEAÑOS, RECEN POR MI


Papa Francisco en su 80 cumpleaños: Recen por mí para que mi vejez sea feliz
Por Miguel Pérez Pichel
Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa.




VATICANO, 17 Dic. 16 / 07:02 am (ACI).- Tras la misa concelebrada en la Capilla Paulina del Palacio Vaticano para celebrar su cumpleaños, el Papa Francisco reflexionó ante los presentes sobre la “vejez”, y pidió oraciones para que la suya sea “tranquila, religiosa y fecunda y también feliz”.

El Santo Padre indicó que “vejez” es “una palabra que desde hace algunos días me viene a la mente y que parece fea. Asusta un poco”.


El Papa comentó divertido cómo el día anterior le regalaron la obra “Sobre la vejez”, de Cicerón. “Una gota más”, dijo sonriendo.

Sin embargo, el Pontífice recordó sus propias palabras: “La vejez es sabiduría”. “Esperemos que también lo sea para mí”, expresó.

Francisco recordó también algunos versos sobre la vejez que le resultan inspiradores. “‘Con paso silencioso, de golpe llega la vejez’, decía Plinio, un poema que recuerdo cuando pensó en cómo ha llegado tan rápido la vejez”.

El Papa también insistió en vivir con alegría esta etapa de la vida. “Cuando uno lo piensa como una etapa que es para dar alegría, sabiduría, esperanza, uno comienza a vivir”. Y recordó otro poema: “‘la vejez es tranquila y es religiosa’. Recen por mí para que mi vejez sea así, tranquila, religiosa y fecunda, y también feliz”.

REZA ESTA ORACIÓN POR EL PAPA FRANCISCO EN SU CUMPLEAÑOS


Reza esta oración por el Papa Francisco en su cumpleaños
Por Abel Camasca



 (ACI).- Cada 17 de diciembre, desde hace 80 años, se celebra el cumpleaños del Papa Francisco y en esta ocasión les compartimos una breve oración que se puede rezar en familia, grupo, comunidad o de manera personal para pedir por el Santo Padre.


Oración

Dios Padre, te doy gracias por nuestro hermano Jorge Mario Bergoglio, actual Papa Francisco, y de manera especial en este día que le has permitido cumplir un año más de vida junto a tu Iglesia peregrina. Te pido que le des más años junto a nosotros, según sea tu voluntad, para que pueda seguir compartiendo tu amor en el mundo y así cumplir fielmente con la importante misión que le has encomendado al servicio de tu pueblo. Derrama sobre él tu Espíritu Santo y concédele aquellos dones que necesita para que sea tu mensajero de paz y de concordia entre las naciones. Guíalo donde quiera que se encuentre y consuélalo cuando se sienta desanimado o triste. Haz que crezca en santidad en el misericordioso Sagrado Corazón de tu Hijo Jesús y que la Virgen María lo auxilie cada día con su manto protector. Amén.

FELIZ CUMPLEAÑOS PAPA FRANCISCO!!!


viernes, 16 de diciembre de 2016

SEAMOS LÁMPARAS QUE ANUNCIAN LA LLEGADA DE JESÚS


Papa Francisco: Como San Juan Bautista seamos lámparas que anuncian la llegada de Jesús
Por Miguel Pérez Pichel
 Foto: L'Osservatore Romano




VATICANO, 16 Dic. 16 / 06:51 am (ACI).- El Papa Francisco reflexionó en la homilía de la Misa celebrada en la Casa Santa Marta sobre la figura de San Juan Bautista cuya vocación era “dar testimonio de Jesús” siendo la “lámpara que indica dónde está la luz”.

En su homilía, el Santo Padre explicó que San Juan Bautista “era la voz. Juan dice de él mismo: ‘yo soy la voz que grita en el desierto’. Él era la voz que da testimonio de la Palabra, que señala la Palabra, el Verbo de Dios, la Palabra. Se consideraba solo la voz que anuncia la Palabra. Él era el predicador de la penitencia que bautizaba, el bautista”.

En este sentido, él mismo describe su función profética que anuncia la llegada del Salvador: “Lo deja claro, lo dice claramente –insistió Francisco–: ‘Detrás de mí viene otro que es más fuerte que yo, más grande que yo, al cual no soy digno ni de desatar las sandalias. Él os bautizará con el fuego del Espíritu Santo’”.

“Este testimonio –continuó el Pontífice– provisional pero seguro, fuerte…, esa antorcha que no se deja apagar por el viento de la vanidad, esa voz que no se deja eclipsar por la fuerza del orgullo se convierte siempre en una voz que señala al que vendrá luego, y que abre la puerta al testimonio y a la voz del Padre al que Jesús hace referencia hoy: ‘Pero yo tengo un testimonio mayor que el de Juan; porque las obras que el Padre me ha encomendado llevar a cabo, las mismas obras que realizo, dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado’”.

El Obispo de Roma destacó cómo San Juan Bautista optó, “con humildad”, por el mismo camino que seguiría más tarde el mismo Jesús.


Terminará “en la oscuridad de una celda, en la cárcel, decapitado, por el capricho de una bailarina, por la envidia de una adúltera y la debilidad de un borracho”.

El Papa también se dirigió de manera especial a los fieles presentes: religiosos, obispos y también a los matrimonios que celebran 50 años de de sus compromisos y les expresó un deseo: “hoy es un hermoso día para preguntarse sobre nuestra propia vida cristiana, si siempre permanecemos abiertos al camino de Jesús, si nuestra vida está repleta de aquel gesto del Bautista: anunciar a Jesús”.

“Les doy las gracias por lo que han hecho, gracias por recomenzar, después de 50 años, con esta ‘vieja juventud’ o ‘juventud vieja’ –¡como el buen vino!–, con ese paso adelante para continuar siendo testimonio de Jesús”.

“Que Juan, el gran testimonio, los ayude en este nuevo camino que hoy, después de la celebración de vuestro 50 aniversario de sacerdocio, de vida consagrada y de matrimonio, reemprenden”, concluyó.

Evangelio comentado por el Papa Francisco:

Juan 5:33-36

33 Vosotros mandasteis enviados donde Juan, y él dio testimonio de la verdad.

34 No es que yo busque testimonio de un hombre, sino que digo esto para que os salvéis.

35 Él era la lámpara que arde y alumbra y vosotros quisisteis recrearos una hora con su luz.

36 Pero yo tengo un testimonio mayor que el de Juan; porque las obras que el Padre me ha encomendado llevar a cabo, las mismas obras que realizo, dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado.

PAPA FRANCISCO A PASTORES: DIGAN LA VERDAD


Papa Francisco a pastores: Digan la verdad y acojan primeros pasos de las personas
Por Miguel Pérez Pichel
 Foto: L'Osservatore Romano



VATICANO, 15 Dic. 16 / 10:56 am (ACI).- En la homilía pronunciada en la Misa celebrada en la Casa Santa Marta, el Papa Francisco reflexionó sobre el significado de la predicación de San Juan Bautista y sus dudas en la cárcel poco antes de morir.

El Santo Padre animó a los pastores en la Iglesia a ser como San Juan Bautista, que acogía el primer paso de los fieles porque confiaba en que luego Dios hacía el resto.

El Papa explicó que “San Juan Bautista no les decía a los fariseos, a los doctores de la ley o a los sacerdotes: ‘Queridos, portaos bien’. No, les dice: ‘¡Raza de víboras!’. San Juan Bautista “predicaba fuerte, con palabras duras”.

No decía palabras suaves porque sabía que los fariseos se le acercaban para controlarlo o a curiosear, pero nunca con el corazón abierto. “De esa forma ponía su vida en peligro, sí, pero actuaba con fidelidad. Y a Herodes le dijo en su cara: ‘Adúltero, no te es lícito vivir así, adúltero’. ¡En su cara!”.

Por el contrario, “si hoy un párroco, en su homilía dominical, dice: ‘Entre vosotros hay algunos que son una raza de víboras y unos adúlteros’, sin lugar a dudas, su obispo recibiría cartas de quejas: ‘Despida a ese párroco que nos insulta’”.

Sin embargo, con el pueblo San Juan era comprensivo. Juan bautizaba a todos los pecadores, “con este mínimo paso adelante porque sabía que con solo ese paso, después el Señor haría el resto”. Y ellos se convertían.


“Es un pastor que entendía la situación de las personas y les ayudaba a seguir adelante con el Señor”. Juan fue el único profeta al que se le dio esta gracia para mostrar a Jesús.

Por otro lado, el Santo Padre indicó que aunque Juan era grande, fuerte y estaba seguro de su vocación, “también tuvo momentos de debilidad, tuvo sus dudas”.

De hecho, cuando estaba en la cárcel comienza a dudar, a pesar de que había bautizado a Jesús, “porque no era un Salvador como él se lo había imaginado”. Y es entonces cuando envía a dos de sus discípulos a preguntarle si era Él el Mesías. Y Jesús corrige la visión de Juan con una respuesta clara. Les dice que vuelvan donde él y le cuentes cómo “los sordos oyen, los muertos resucitan…”.

“Los grandes pueden permitirse el lujo de dudar porque son grandes”, afirmó el Papa.

“Los grandes se pueden permitir la duda, y eso es bello. Están seguros de la vocación, pero cuando el Señor les hace ver una nueva bifurcación del camino, les entra la duda. ‘Pero esto no es ortodoxo, esto es herético, este no es el Mesías que yo esperaba’. El diablo hace este trabajo. Esa es la grandeza de Juan, un grande, el último de aquella serie de creyentes que comienza con Abraham, que predicó la conversión, que no utiliza medias palabras para condenar el orgullo, que al final de su vida se permite dudar. Y este es un buen programa de vida cristiana”.

Francisco concluyó la homilía pidiendo “a San Juan Bautista la gracia de la valentía apostólica de decir siempre las cosas con verdad, con amor pastoral, para recibir a la gente con lo poco que se puede dar. Dios hará el resto. Y que nos conceda también la gracia de dudar. Que tantas veces, quizás al final de nuestras vidas, podamos preguntar: ‘¿Pero es verdad todo aquello en lo que he creído o sólo son fantasías?’, la tentación contra la fe, contra el Señor”.

Evangelio comentado por el Papa

Lucas 7:24-30

24 Cuando los mensajeros de Juan se alejaron, se puso a hablar de Juan a la gente: «¿Qué salisteis a ver en el desierto? ¿Una caña agitada por el viento?


25 ¿Qué salisteis a ver, si no? ¿Un hombre elegantemente vestido? ¡No! Los que visten magníficamente y viven con molicie están en los palacios.

26 Entonces, ¿qué salisteis a ver? ¿Un profeta? Sí, os digo, y más que un profeta.

27 Este es de quien está escrito: He aquí que envío mi mensajero delante de ti, que preparará por delante tu camino.

28 «Os digo: Entre los nacidos de mujer no hay ninguno mayor que Juan; sin embargo el más pequeño en el Reino de Dios es mayor que él.

29 Todo el pueblo que le escuchó, incluso los publicanos, reconocieron la justicia de Dios, haciéndose bautizar con el bautismo de Juan.

30 Pero los fariseos y los legistas, al no aceptar el bautismo de él, frustraron el plan de Dios sobre ellos.